El llanto no pudo ser contenido ni un segundo más. Cuando los jugadores de Alianza Lima se enteraron del empate entre Sport Áncash y Atlético Minero en Caraz derramaron lágrimas de alegría. Ellos habían conseguido vencer a Sporting Cristal 1-0 y ese esfuerzo había sido entonces bien retribuido.
Y es que cuando empezó el año ni el más apático hincha del cuadro de La Victoria -o el más férreo seguidor de Universitario- podría pensar que el cuadro íntimo tendría un año tan horroroso en el que la pesadilla de perder la categoría se repetiría cada noche hasta la penúltima fecha del Torneo Clausura 2008, sin embargo, así ocurrió.
Un gol de Pedro Aparicio marcado a los 5 minutos del compromiso entre el cuadro blanquiazul y el bajopontino le permitió a los jugadores e hinchas victorianos despertar finalmente de ese sueño consciente, de esa angustia que amenazaba con dejar a su equipo en Segunda acompañando a otro cuadro popular: Sport Boys. De allí el llanto reprimido, la felicidad dejada en libertad.
No fue fácil, sin duda, para sus corazones aguantar el grito de gol que se falló Wilmer Aguirre a los 48', cuando lo tenía todo para asegurar la victoria -tras excelente servicio de Johnnier Montaño- y la mandó al cielo, o saber que en Caraz la virtual victoria de Atlético Minero sobre Sport Áncash extendería su aflicción una semana más.
Si bien los celestes arrinconaron a Alianza Lima durante algunos pasajes del compromiso, la férrea defensa liderada por Salomón Libman, que salvó del empate en varias ocasiones al cuadro íntimo, consiguió aguantar el resultado.
El fin del cotejo llegó y con él también la noticia de que una 'Amenaza verde' había sacado fuerzas de su orgullo y, sobre el final de su respectivo encuentro, le había conseguido arrebatar el triunfo al Atlético Minero.
Los anaranjados habían logrado voltear con dos goles de Renzo Benavides (45' y 62') un compromiso que empezó ganando el cuadro local mediante un gol de Calheira (33'). Sin embargo, los auriverdes igualaron la cuenta en los descuentos entendiendo que la posibilidad de alcanzar un cupo para disputar la Copa Sudamericana podría corresponderle a su esfuerzo.
Y así se salvó Alianza Lima. Y así celebraron sus sufridos hinchas, pasando a ignorar por completo la goleada (3-0) que le propinó Juan Aurich al Alianza Atlético en Chiclayo con dos anotaciones de Fernando García (13' y 72') y otra de Edinson Chará (90').
Tampoco les importó que Bolognesi perdiese la oportunidad de vencer a Cienciano luego de ponerse adelante en el marcador -con goles de Roberto Demus (17') y Juan José Barros (28')- y terminó cediendo un empate a merced de Mauricio Montes (34') y Manuel Marengo (48'). Lo justo para también olvidarse de la baja.
Con 63 puntos en la tabla de puntaje acumulado, el conjunto victoriano se salvó matemáticamente de perder la categoría. Allí, abajo, lucharán ahora solo el cuadro de Matucana (59 puntos) y los chiclayanos (61). Después de 25 fechas de incontenible desesperanza, dulces sueños, Alianza Lima.
Y es que cuando empezó el año ni el más apático hincha del cuadro de La Victoria -o el más férreo seguidor de Universitario- podría pensar que el cuadro íntimo tendría un año tan horroroso en el que la pesadilla de perder la categoría se repetiría cada noche hasta la penúltima fecha del Torneo Clausura 2008, sin embargo, así ocurrió.
Un gol de Pedro Aparicio marcado a los 5 minutos del compromiso entre el cuadro blanquiazul y el bajopontino le permitió a los jugadores e hinchas victorianos despertar finalmente de ese sueño consciente, de esa angustia que amenazaba con dejar a su equipo en Segunda acompañando a otro cuadro popular: Sport Boys. De allí el llanto reprimido, la felicidad dejada en libertad.
No fue fácil, sin duda, para sus corazones aguantar el grito de gol que se falló Wilmer Aguirre a los 48', cuando lo tenía todo para asegurar la victoria -tras excelente servicio de Johnnier Montaño- y la mandó al cielo, o saber que en Caraz la virtual victoria de Atlético Minero sobre Sport Áncash extendería su aflicción una semana más.
Si bien los celestes arrinconaron a Alianza Lima durante algunos pasajes del compromiso, la férrea defensa liderada por Salomón Libman, que salvó del empate en varias ocasiones al cuadro íntimo, consiguió aguantar el resultado.
El fin del cotejo llegó y con él también la noticia de que una 'Amenaza verde' había sacado fuerzas de su orgullo y, sobre el final de su respectivo encuentro, le había conseguido arrebatar el triunfo al Atlético Minero.
Los anaranjados habían logrado voltear con dos goles de Renzo Benavides (45' y 62') un compromiso que empezó ganando el cuadro local mediante un gol de Calheira (33'). Sin embargo, los auriverdes igualaron la cuenta en los descuentos entendiendo que la posibilidad de alcanzar un cupo para disputar la Copa Sudamericana podría corresponderle a su esfuerzo.
Y así se salvó Alianza Lima. Y así celebraron sus sufridos hinchas, pasando a ignorar por completo la goleada (3-0) que le propinó Juan Aurich al Alianza Atlético en Chiclayo con dos anotaciones de Fernando García (13' y 72') y otra de Edinson Chará (90').
Tampoco les importó que Bolognesi perdiese la oportunidad de vencer a Cienciano luego de ponerse adelante en el marcador -con goles de Roberto Demus (17') y Juan José Barros (28')- y terminó cediendo un empate a merced de Mauricio Montes (34') y Manuel Marengo (48'). Lo justo para también olvidarse de la baja.
Con 63 puntos en la tabla de puntaje acumulado, el conjunto victoriano se salvó matemáticamente de perder la categoría. Allí, abajo, lucharán ahora solo el cuadro de Matucana (59 puntos) y los chiclayanos (61). Después de 25 fechas de incontenible desesperanza, dulces sueños, Alianza Lima.
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